Cuando entramos a indagar, respecto a ciertos elementos presentes en la naturaleza, nos encontramos con una amplia variedad de fenómenos y hasta elementos topográficos que nos llaman la atención.
Siendo uno de ellos, el referido a la presencia de montañas, que tienen sus particularidades propias, por lo cual a continuación describiremos algunos de sus aspectos relevantes, tales como: Su definición, su origen, partes de una montaña, entre otros factores de interés.
¿Qué es una Montaña?
En términos generales, una montaña es una forma topográfica, que resalta del relieve terrestre, y se considera una especie de eminencia natural, cuyo principal rasgo es su altitud.
Así mismo, presenta una altura relativa, con un gran volumen y una pendiente pronunciada.
Las montañas, pueden formar parte de un sistema o de una cadena montañosa, así como también formar un relieve asilado en relación al paisaje que la rodea.
Aunque no existe una definición única para la montaña, es común asociar a la misma la presencia de elevaciones o pendientes, y su término hace referencia a cumbres empinadas o sencillamente una elevación del terreno.
Por otra parte, y de acuerdo al proceso de su formación, las montañas pueden tomar formas muy distintas, siendo que es posible encontrar desde cadenas de colisión, escarpes de los márgenes continentales, hasta arcos insulares con volcanes de tipo explosivos, entre otros tipos.
Aspecto de interés está el hecho que las tierras que han emergido y que poseen alturas por encimas de los 1000 metros sobre el nivel del mar, es un aproximado del 25 % del total, siendo que el terreno considerado como montaña, en la región de Eurasia abarca hasta un 33 %.
Mientras que representan el 24 % de América del Norte, un 19 % de América del Sur y hasta un 14 % de África. Así mismo, se estima que un 10% de la población mundial habitan en regiones de montañas.
Aspecto vital, es conocer que los ríos de mayor caudal, en todo el mundo, tienen su origen en regiones montañosas, y más del 50% de la población mundial depende del agua proveniente de tales regiones, lo que nos da una idea de su gran importancia.
Por otra, dicho porcentaje de dependencia del agua de las montañas, asciende hasta un 90 % en aquellas zonas áridas o semiáridas, debido al hecho que la purificación de tales aguas es más económicas que purificar aguas provenientes de los mares.
Origen de las montañas
En primera instancia, las montañas se originan por fuerzas endógenas, y posteriormente son modificadas por factores exógenos, tales como la erosión. En tal sentido, las orogénesis, que han ocasionado mayor huella en los relieves o topografías actuales de los continentes, se desprenden del plegamiento herciniano.
Dicho plegamiento, pertenece a la Era Paleozoica, y del plegamiento alpino, en la Era Cenozoica. Así mismo, durante el Período Cuaternario, las glaciaciones han ocasionado erosiones en las cadenas montañosas.
Otro ejemplo de formación montañosa, es de la era terciaria, de donde se originó la Cordillera de Los Andes.
Durante la historia de nuestro Planeta Tierra, destacan tres grandes períodos de formación de Montañas, a saber:
- Orogenia Caledoniana: Siendo que sus montañas se formaron hace 400 millones de años, tal es el caso de Escocia, cuyo pico de mayor elevación es el Ben Nevis.
- Orogenia Herciniana: Consta de relieves formados hace 270 millones de años, siendo un ejemplo los Urales, ubicado entre Asia y Europa; y los Apalaches ubicados en NorteAmérica.
- Orogenia Alpina: Consta de relieves montañosos que se manifiestan en larga cordilleras, las cuales se formaron hace unos 35 millones de años, tal es el caso del Himalaya en Asia y los Alpes en Europa.
Clima en la Montaña
En virtud del gradiente térmico adiabático, se registra una disminución en la temperatura del aire, a una razón de 0,5 °C a 1 °C por cada 100 metros de altitud, bajo una presión atmosférica normal aproximada de 1000hPa al nivel del mar.
Sin embargo, la amplitud diaria es mayor, aun cuando la amplitud anual es menor que en las tierras bajas. Siendo que, es posible se puede colocar una capa de inversión en determinadas altitudes, logrando cambiar el gradiente de temperatura.
El fenómenos anterior hace posible que las masas de aire frío queden atrapadas en los valles, lo cual sucede cuando existe un anticiclón.
Por otra parte, cuando las masas de aire provenientes de los océanos, las cuales están cargadas de humedad; chocan contra los relieves de la montaña, se ven obligadas a elevarse por encima de la vertiente del viento, ocasionando que se enfríen (por efecto de relajación), lo que traduce en su condensación y por ende se producen fuertes lluvias.
Partes de una Montaña
Por lo general las montañas constan de las siguientes partes:
- Valle: Corresponde a una especie de hundimiento que se encuentra entre dos montañas.
- Ladera o falda: Es la parte inclinada que cumple la función de conectar la cima con el pie de la misma.
- Base (también conocida con el pie de la montaña): Se refiere a la parte más baja de la formación, que se encuentra al nivel del suelo.
- Cima o cúspide: Es la parte superior, donde alcanza su mayor altura la montaña.
Ecosistema en la Montaña
Debido a sus características propias, que otorgar una función muy particular entre su altitud y la temperatura, las montañas pueden albergar ciertos ecosistemas específicos.
Al respecto, en su parte inferior es posible encontrar una vegetación similar a la del llano que la rodean. No obstante, a medida que aumenta la altitud se aprecian especies más hidrófilas y con mayor resistencia al frío.
Seguidamente, a las especies arbóreas; se refleja una pradera alpina con rocas y hasta inclusive ciertas zonas con nieve permanente.
Sin embargo, las especies presentes, pueden variar de acuerdo a que cual continente pertenece la montaña en cuestión, así como también al factor de latitud.
Por otra parte, una variable de incidencia, es el hecho de si la vertiente tiene una orientación hacia la umbría o hacia la solana, o si está al viento o a sotavento.
En base a los niveles de altitud y del relieve, es posible encontrar los siguientes biomas terrestres:
- Bosques de coníferas tropicales y subtropicales con su 15 ecorregiones.
- Las praderas y matorrales de montañas con sus 48 ecorregiones.
- El bosque templado de coníferas y sus 52 ecorregiones.